Entrevista de la revista Acción a Stana Katic a su paso por Madrid
La revista ‘Acción’ entrevista a Stana Katic durante su visita a Madrid para el preestreno de la segunda temporada de Absentia
Nos saluda a todos, uno a uno, según entra en la habitación, y me pregunta si soy fan de Star Wars, al ver mi sudadera de Yoda. Ella también lo es, pero quiere saber si soy fan de Star Trek también, lo que nos lleva a discutir brevemente por qué me gusta Enterprise o Discovery más que las originales.
Dice que le encantaría aparecer en alguna de las nuevas series (ya están tardando en ofrecérselo) y que su primera audición en California fue para Enterprise, curiosamente. Sí, Stana Katic es encantadora y divertida, se emociona incluso durante la entrevista ante una pregunta y habla con pasión enorme de su serie, Absentia, que estrena temporada 2 en AXN. Y nos recuerda antes de irse que hay que conseguir llevar a Star Trek. Nosotros encantados.
Pasó ocho temporadas en una serie de mucho éxito, Castle. ¿Qué le llevó a elegir Absentia como siguiente proyecto, y a ser además productora de la serie?
Uno de los aspectos que me convenció es que era diferente, era un thriller psicológico, era algo emocionante. También íbamos a trabajar con otros cineastas y contar la historia de una manera que era cercana al cine independiente, y eso era algo que me parecía muy interesante. Éramos un grupo de gente muy apasionada para contar diez episodios de televisión de una forma única, y estar en una comunidad creativa en la que se solucionasen problemas y se aceptasen retos con la única meta de contar la historia de la mejor forma que podamos. Eso era suficientemente tentador como para convertirse en el siguiente paso en mi carrera.
Lo que me sorprende es que es un personaje que puede ser muy antipático, con muchas aristas. ¿Era lo que buscaba?
Ahora mismo me llaman mucho la atención los antihéroes. Lo decía el otro día, creo que ayer, que me llama mucho el personaje de Cillian Murphy en Peaky Blinders, me encanta el personaje de Tom Hardy en Taboo, y me gusta interpretar la versión femenina de algo parecido a eso. Creo que es interesante explorar tanto lo positivo como lo negativo de ser humano, todos lo tenemos dentro.
Es interesante porque a veces cuando estamos en el set rodando, ella tiene algo que decir, una línea de diálogo que es lo más borde o maleducado que se puede decir, y nos preguntamos a veces si queremos mantenerlo, y yo suelo decir que sí, que por supuesto. Que, a veces, todos nos comportamos como gilipollas como seres humanos, así que tenemos que mantener esa frase.
La primera temporada cerraba todas, o casi todas las tramas, y daba la sensación de que podía haber sido una miniserie. Parecía una película de diez horas. ¿Era esa la intención creativa?
Siempre cabe la posibilidad con la primera temporada de ser cancelada, pero tuvo gran acogida por su distribuidor americano que es Amazon, y una acogida maravillosa por las diversas cadenas europeas, incluyendo AXN España y Portugal. Supongo que en estos casos siempre es una posibilidad, pero en este en concreto, desde muy pronto supimos que íbamos a contar con más temporadas.
¿Y el hecho de que parezca una película con diez capítulos es algo que buscaban creativamente? Más allá de la cancelación o renovación.
Esto es algo que me atrajo del proyecto en un primer momento. Como te decía antes, queríamos hacer cine independiente para televisión, no televisión independiente. Cine independiente. Los directores que se han sumado al proyecto aportan un tono cinematográfico, los actores que incorporamos le dan una profundidad y complejidad a los personajes que es cinematográfica en última instancia. Incluso parte del aspecto visual en torno al cual gravitamos es de novela gráfica. Esto me atrajo del proyecto en un principio, y creo que al final erra muy difícil no crear algo así porque teníamos a un director para los diez episodios de la primera temporada.
Rodábamos todo basado en la localización. Podía rodar algo del episodio 2, luego del 7, y el 4, todo el mismo día en la misma localización. Era intenso mantener dónde estaba emocionalmente el personaje, con eso en mente, pero creo que es lo que te hace sentir que es más una película que una serie de televisión. Ahora, en la segunda temporada, tenemos tres directores, y hemos dividido la historia en tres partes, con el primer director dirigiendo cuatro episodios, el siguiente tres y el siguiente otros tres. Y lo han narrado como tres capítulos de una película.
Llorar muy bien (risas). Porque, como buena actriz, cuando llora intenta no llorar. Hay una escena de la primera temporada cuando se reencuentra con su hijo y va a abrazarle, que es muy emocionante. ¿Cómo se construye ese dolor como madre?
(Se emociona visiblemente). Lo estoy recordando, lo estoy recordando ahora mismo, eso es lo que me pasa. Es ridículo (risas). Hay un par de recursos que uso. Por supuesto, se trata de buscar la realidad del personaje, pero recuerdo ver una foto, tras un terremoto en Perú, en Lima, de una madre que estaba enterrando a su hijo, y era una foto muy intensa (vuelve a emocionarse), porque podías notar que no le quedaban sentimientos, estaba completamente vacía. Mírame, es de locos… Hasta ese punto me afectó. Nunca he olvidado esa foto. A veces te encuentras con fotos así y las guardas en el banco de memoria. Ese es uno de los recursos para entender quién es esta persona, mi personaje, y cómo se sentía. Fue un momento muy poderoso… No tengo ocasión de hablar de cosas así muy a menudo.
Vamos a aligerar un poco el momento, hablemos de la temporada 2. Al principio de la temporada hemos encontrado a una Emily que está destrozada… ¿Cómo va a evolucionar?
Sí, la segunda temporada comienza con Emily rota, pero intentando recomponer las piezas. Tiene un apartamento propio, que en el mundo de Emily no tiene que ser super elegante ni super cómodo… digámoslo así, no está haciendo brownies con un delantal puesto. Todo lo qu experimentamos con el personaje esta temporada está un poco más al límite, porque todavía está en una búsqueda, tratando de descubrir qué le pasó de verdad. Hemos hablado un poco de esto, pero en la primera temporada ella era el misterio, y como audiencia lo experimentábamos objetivamente y hasta cierto punto nos uníamos a ella, pero durante gran parte del viaje lo hacíamos desde la distancia. En esta segunda temporada nos unimos a su viaje, desde el principio, mientras intenta descubrir cuáles son las piezas de su interior que están rotas, qué paso realmente y cómo puede recomponerse. Y si podrá algún día llevar una vida normal, o tener una relación normal con su hijo, con su padre, con un amante… porque habrá varios amantes esta temporada. ¿He dicho varios? (risas).
Eso casi es un spoiler… (risas) Lo comentaba también porque en esta temporada la serie parece nueva, completamente distinta a la anterior.
Bueno, si tienes a un personaje que pasa por lo que pasó Emily en la primera temporada tiene que haber algún tipo de secuelas en la segunda. No puede hacer como si todo estuviese bien, especialmente después de la bomba que lanzamos al final de la temporada. Creo que lo que estamos intentando es ser respetuosos con esa realidad. Sobre todo al inicio. Y las cosas van a ir revelándose según avancemos. Algunas de las acciones que quizá no tienen sentido ahora, pueden tenerlo más adelante. Y eso no es un spoiler… (risas).
Fuente: Revista Acción (Mayo 2019), entrevista por Jesús Usero